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España es el país que pone más trabas al autoconsumo eléctrico, según un informe de la Agencia Internacional de la Energía (AIE) en el que se comparan 20 países.
El informe del autoconsumo eléctrico en España y resto de países es realizado por la Agencia Internacional de la Energía (AIE), una organización internacional fundada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en 1974, después de la crisis del petróleo del año 73. Su objetivo es coordinar las políticas energéticas de sus estados miembros, buscando asegurar la adquisición de energía fiable y limpia.
Informe del autoconsumo eléctrico de AIE
El autoconsumo eléctrico en España saca mala nota en el estudio comparativo entre 20 países de AIE. El informe se ha concluido tras comparar países como Alemania, Francia, Dinamarca, Austria, Estados Unidos, México o Brasil. Tiene el objetivo de evidenciar cuáles han sido los métodos de establecimiento de las instalaciones de autoconsumo en varios países y comprobar sus diferencias y descubrir fórmulas para mejorarlas.
El estudio de AIE sobre autoconsumo eléctrico en España, y en el resto de los 20 países investigados, está enmarcado dentro del Programa sobre Sistemas de Energía Fotovoltaica, que se está desarrollado también con la colaboración de la Comisión Europea y otras 29 organizaciones, como el Instituto Europeo del Cobre. Todo con el fin de potenciar la colaboración internacional para ubicar la energía fotovoltaica como elemento clave hacia el cambio del modelo energético y una implantación de modelos de generación de energías sostenibles.
Informe del autoconsumo eléctrico
Según el estudio de la AIE sobre el autoconsumo eléctrico en España, deberíamos tener más facilidades para ello, ya que nuestro país es uno de los 16 de la investigación que ha logrado la paridad de red. Con lo cual, la media del coste de la producción de electricidad de autoconsumo en su periodo de vida útil, es idéntico al que tendría la electricidad consumida de la red.
Trabas al autoconsumo eléctrico en España
Sin embargo, el autoconsumo eléctrico en España se ve limitado porque es el único país que se cobra una cantidad por el importe ahorrado en la factura de la luz gracias al autoconsumo, para recuperar los costos de red.
En otros países se compensa económicamente por introducir el excedente de electricidad fotovoltaica en la red. Aunque también hay que decir que la compensación varía bastante entre las diferentes naciones. Pero, sin embargo, el autoconsumo en España no se compensa nada de nada el añadir electricidad a la red, considerándose que la electricidad fotovoltaica no tiene ningún valor en el mercado, salvo que se cumplan con una serie de requisitos muy exigentes.
Esperemos que podamos concienciar a nuestros políticos de la importancia de mejorar las condiciones del autoconsumo eléctrico en España. Este cambio de paradigma es necesario por el bien de todos, así que, por lo menos, empecemos a presionar con el voto para dejar de estar en la cola de los países desarrollados en el autoconsumo eléctrico. Ya que mantener este estado de cosas es dejar un status quo que beneficia a las grandes compañías, en vez de a la gran mayoría que somos todos los habitantes del planeta azul.
Algunas conclusiones del estudio:
- En todos los países el autoconsumo es legal, con algunas especificaciones en cada uno.
- La mayoría de los países permite que se obtenga un beneficio económico por inyectar en la red, energía producida por el autoconsumo, aunque esta compensación varía por países. En términos generales, el valor de la electricidad está relacionado con el precio en el mercado mayorista.
- La mayoría de los países no le cobran a los autconsumidores los costos fijos por conectarse a la red.
- En general, la propiedad de las instalaciones FV puede ser diferente a la de sus consumidores. En México y Brasil se permite que el consumo de energía sea en un lugar diferente a la ubicación de las instalaciones que la producen.
