Tendencias en la decoración con flores frescas para mantener nuestras casas bonitas y alegres

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flores frescas

Las flores frescas son una constante en las casas decoradas con pasión y buen gusto, porque además de conectarnos con la naturaleza, nos transmiten buenas vibraciones.

Aunque las flores que elegimos suelen estar muy relacionadas con nuestra personalidad, existen diversas tendencias que es bueno tener en cuenta para decorar la casa con ellas.

Va de estaciones

Dependiendo de las estaciones podemos encontrar ciertas especies, ello condicionará los ramos que podremos crear o comprar en Flores Barcelona.

En primavera y verano los colores son vivos y llamativos pero en otoño-invierno se apagan y pierden brillo (mas no belleza).

Dicho de otra manera, la explosión de color de los tulipanes, los girasoles y las dalias, dan paso a las rosas; en su mejor momento (en tono melocotón), también a las flores y follajes de colores ocres y azules.

Por otra parte, si bien en verano las protagonistas absolutas son las flores, durante los meses fríos comparten protagonismo con el follaje, por ejemplo con el eucaliptus o el brezo que en otoño abundan en la naturaleza.

Vuelta al romanticismo

Una de las tendencias en decoración con flores frescas es la vuelta al romanticismo.

El estilo romántico está pleno de rosas, hortensias, camelias y peonías en sus versiones más delicadas: blancas, rosa pálido o suaves tonos malva.

Reposan en floreros de cristal o madera envejecida y se adornan con lazos y objetos antiguos que le dan un acento vintage y sofisticado.

Armonía o contraste

Si queremos que nuestro ramo de flores armonice con los colores de las paredes o los muebles, escogeremos tonos parecidos a éstos pero menos intensos, para no recargar el ambiente. Así lograremos armonía ya que todo estará conjuntado.

Si por el contrario, nos gusta el contraste elegimos un ramo de flores frescas de colores contrastantes, es decir, opuestos en el círculo cromático como amarillo y azul o rojo y cian, por ejemplo.

En este último caso es más probable que el ramo destaque, sobre todo si es grande y de flores generosas.

Flores frescas por toda la casa

Si bien en días de nuestros padres se solía poner flores principalmente en el salón, hoy día no hay límite: en cualquier rincón de casa puede habitar un jarrón con flores al gusto.

Lugares antes insospechados como la entrada de casa, el baño, el dormitorio o la cocina son ahora perfectos huéspedes de ramos de flores maravillosas.

Según thecolvinco.com, su sitio de honor sigue siendo la mesa de centro del salón e incluso la mesa del comedor pero cuidando siempre que la altura del ramo no impida la comunicación entre los comensales.

Sencillez y elegancia

Los arreglos florales rígidos y formales, han cedido relevancia a ramos más sencillos y elegantes donde lo importante es volumen el movimiento.

Aunque en estos casos también lo es el jarrón, aún cuando no debe opacar las flores, es bueno que tenga fuerza y personalidad.

El mejor recipiente

Los envases de cristal continúan ganando seguidores. Desde un tarro reciclado hasta un jarrón de marca, contienen flores por doquier.

La predilección de quienes los utilizan se debe a que es más natural. Pero hay que decirlo: los tallos deben estar bonitos y el agua limpia y cristalina.

A lo rústico

Otro estilo con tirón es el rústico. Este vive su época más vistosa durante las estaciones frías. Para él la propuesta se basa en jarrones de barro, combinación de flores frescas y secas.

Como elementos más duraderos nuestro ramo podría tener eucaliptus, banksias y plumeros en combinación con crisantemos santini y crisantemos de flor grande.

Para confirmar el estilo rústico, se pueden añadir todo tipo de detalles de origen orgánico como cuerdas o cintas de esparto, rafia o yute y cualquier detalle que evoque la vida rural.

Ramos minimalistas

En un estilo tan en boga como el minimalista también se ponen flores. La intención puede ser aportar un toque de color a los usuales tonos neutros de este estilo, o armonizar con el resto de la decoración.

Por ejemplo un arreglo de calas amarillas da un toque de vitalidad al ambiente colocadas en un florero de cristal alargado.

Pero si se trata de crear un punto de color, un jarrón blanco conteniendo un ramo de bayas de picaranta llamará la atención por su intenso color naranja.

En general, se trata de ramos con pocas flores, solitarias o con mínimo follaje, poco volumen, figuras geométricas, simetría y escasos detalles como pueden ser unas velas.

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