Cómo sembrar puerros en el huerto familiar

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Aprende cómo sembrar puerros y vive la satisfacción de comer algo producido por ti.

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Yo empecé con este rollo de la horticultura como un pasatiempo, y aunque luego inicié lecturas más completas, en un principio hice muchas cosas por instinto o por ensayo y error. Una de esas veces en las que cuales mi sexto sentido no falló fue cuando se me ocurrió sembrar puerros, cebollas y ajos  en la misma época del año aunque no en el mismo suelo de mi huerto familiar.

Son cultivos muy fáciles que no requieren de excesivos cuidados. Los puerros son conocidos también como ajoporros.

Puerros

Siembra: se hace a través de semillas en un semillero y cuando han germinado y crecido hasta unos 15 cm, con 2 o 3 hojas (unos dos meses aprox.) se transplantan al suelo donde crecerán. Se ponen cada 15 centímetros en hileras separadas por 30 cm. Si estás por encima del Ecuador (Hemisferio Norte), lo mejor es plantarlas en verano (agosto y septiembre) para cosecharlas en invierno. Lo más común es que se siembren en marzo, para transplantar dos meses después.  Se pueden cultiver perfectamente en macetas, tipo jardineras, con una profundidad mínima de 20 cm.

Si tu huerto familiar está ubicado en el Hemisferio Sur puedes sembrar puerros durante casi todo el año. Aunque si la temperatura baja mucho se deben proteger. En invierno se pueden sembrar cubriendo los semilleros para que resistan el frío.

Se siembran individualmente, es decir, cada semilla dará un puerro y la planta pequeña debe sembrarse a distancia suficiente de la siguiente para que crezcan grandes y no compitan por los nutrientes.

Temperatura: Dependiendo de la especie, se puede cultivar por lo menos 8 meses del año, ya que las menos resistentes al frío no aguantan el invierno, a menos que tengas un invernadero.  Deben estar entre 13 y 24 º para crecer bien.

Suelo: debe tener un buen drenaje y mezclarse con abono orgánico (compost) ya que necesita un suelo con suficientes nutrientes. Mejor que sea un suelo ligero y suelto.

Riego: para los puerros lo ideal es mantener un ritmo de riego uniforme con descarga de agua también uniformes, no encharcar, tampoco dejar secar, y mantener la humedad constante. Para ello lo mejor es regar la misma cantidad de agua a la misma hora del día. Pare ello es muy apropiado el riego por goteo con un temporizador (es un equipo que no es tan caro y merece la pena si se siembran bastantes plantas).

Abono: se le suele aplicar dos veces durante los 5 meses que toman los puerros en estar listos para recolectar. Aunque el tipo de abono es al gusto, lo mejor es escoger una opción ecológica como el guano u otro similar para tu huerto familiar. Si hacia la última etapa de su crecimiento los puerros toman mucha altura, es recomendable recortarles las hojas verdes, para que no se «suban» demasiado y pierdan fuerza en la parte blanca (inferior).

Con el puerro, o ajoporro, podemos preparar muchos platos como sopas, cremas y guarniciones de verduras.

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